CPA FERRERE
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BCU aumenta encajes marginales para contener presiones inflacionarias

La medida: el BCU anunció un aumento de 5 puntos en las alícuotas de encajes marginales aplicables a los depósitos en moneda nacional y moneda extranjera, que a partir del 1º de abril serán 25% y 45% respectivamente.

Objetivo: moderar el ritmo del crecimiento del crédito a través del encarecimiento de las operaciones de intermediación financiera, y por esta vía disminuir las presiones inflacionarias.

Contexto: la medida se adoptó luego de conocerse el dato de inflación de febrero, que ubicó la inflación interanual nuevamente cerca del 9%. De esta forma, ante el repunte de las presiones inflacionarias, el BCU entendió conveniente complementar la suba de la tasa de política monetaria anunciada en diciembre de 2012, reforzando su señal de compromiso con la estabilidad de precios.

Dilemas de política monetaria: cabe destacar que la medida se adopta en un contexto en el que se ha acrecentado notoriamente el dilema entre inflación y tipo de cambio, ya que el peso uruguayo es una de las monedas que más se había fortalecido en el mundo durante la segunda mitad de 2012. Adicionalmente, la suba de la tasa de política monetaria (TPM) anunciada por el BCU el pasado mes de diciembre introdujo una presión adicional hacia el fortalecimiento de la moneda. Es por ello que con el objetivo de evitar una apreciación abrupta de la moneda, el BCU ha desplegado una política agresiva de intervenciones en el mercado de cambios: en lo que va del 2013 el BCU ha comprado USD 535 millones en el mercado de cambios, mientras que en todo 2012 había realizado intervenciones por USD 660 millones. En este contexto, una nueva suba de la tasa de interés podría resultar inconveniente en la medida que agravaría las presiones en el mercado de cambios obligando a incrementar el ritmo de intervenciones. En este sentido, este incremento de los encajes marginales se adopta como una medida de ?segundo óptimo? dado que la opción de incrementar nuevamente la TPM podría derivar en desequilibrios más pronunciados del tipo de cambio real.

Impacto esperado: si bien es probable que la medida actúe moderando el crecimiento del crédito, entendemos que la misma no será suficiente para solucionar los desafíos en materia inflacionaria. En este sentido, mientras que no exista una mayor coordinación macroeconómica plasmada en una política fiscal más austera y una política de ingresos más moderada, las presiones inflacionarias seguirán latentes y los ajustes en el sistema de precios continuarán recayendo sobre la política monetaria, el tipo de cambio y la rentabilidad del sistema financiero.