Alfonso Capurro y Gabriel Oddone, de CPA Ferrere, y Miguel A. Kiguel, Director de Econviews, analizaron las perspectivas económicas y los desafíos para las políticas económicas en Argentina y Uruguay en los próximos dieciocho meses.

Miguel A. Kiguel analizó la situación política y económica de Argentina junto con las perspectivas de cara a las próximas elecciones de octubre. El Director de Econviews afirmó que el país ingreso en una nueva etapa del ciclo económico a partir de 2011 con un crecimiento del PIB menor al observado durante el período 2002-2011. Asimismo, destacó que si bien la economía se desaceleró de forma pronunciada a partir de ese momento, no es de esperar que el país enfrente una crisis económica aguda en el corto plazo. Por último, el economista identificó la inflación y el tipo de cambio como los dos principales problemas que deberá afrontar Argentina de cara a los próximos años.

Por su parte, Alfonso Capurro destacó que el cambio de era a nivel del sistema financiero internacional, sobre el cuál CPA Ferrere había advertido en la reunión de marzo, ha tomado mayor impulso durante los últimos meses a raíz de la recuperación más vigorosa de la economía norteamericana.

Respecto a Uruguay, Capurro advirtió sobre la profundización de la desaceleración económica a raíz de los cambios en el escenario externo, en particular, el menor crecimiento esperado de Brasil y el fortalecimiento del dólar frente a las monedas emergentes.

A su vez, Capurro analizó los cambios implementados por el Banco Central del Uruguay (BCU) en materia de política monetaria y sus implicancias. En relación a este punto, señaló el cambio de diagnóstico por parte de las autoridades, en particular, respecto a las operaciones de carry trade y sus consecuencias sobre el dólar y los equilibrios fiscales. De esta forma, el rediseño de la política tiene implícito una reorientación de objetivos que pone como centro de atención evitar erosiones adicionales de la competitividad, relegando el compromiso de inflación en 5% a un segundo plano.

Finalmente, Capurro sostuvo que las medidas adoptadas por la autoridad monetaria no son suficientes para recomponer los desequilibrios macroeconómicos de la economía. Para ello sería necesario realizar además ajustes reales en términos de política fiscal y de ingresos.

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