CPA FERRERE
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Reunión del Servicio de Análisis y Pronósticos Económicos

Alfonso Capurro, Gabriel Oddone y Santiago Rego disertaron sobre ?La actividad se desacelera y los equilibrios macro se tensionan: perspectivas económicas 2015 y desafíos para el próximo Gobierno?, en el marco de la reunión de clientes del Servicio de Análisis y Pronósticos Económicos realizada hoy en el auditorio del Edificio Ferrere.

Los economistas de CPA Ferrere adelantaron que las estimaciones oficiales del PIB del segundo trimestre podrían sugerir una recesión técnica debido al impacto estadístico del ?efecto pascua?. De todos modos, la actividad crecería 2,4% y 3,1% en 2014 y 2015, por encima del desempeño de Argentina y Brasil que crecerían en torno al 1,5%. En otro orden, Uruguay consolidó un deterioro fiscal en los últimos años que requiere correcciones, ya que el resultado primario actual (-0,5% del PIB) no sería sostenible en la medida que implicaría una trayectoria divergente del ratio Deuda/Producto. Los economistas de CPA advirtieron además que Brasil enfrenta nuevamente dificultades de crecimiento, y que al igual que en 2011 las autoridades podrían promover un deslizamiento del Real para impulsar las exportaciones. En este contexto, el peso uruguayo tendrá dificultades para seguir esta eventual trayectoria del Real ya que el espacio para realizar correcciones de precios relativos es muy acotado: en las condiciones actuales el tipo de cambio tendría un ?techo? de $Uy 26 en 2015.

La actividad económica se desacelera. ¿Cuánto creceremos en 2014 y 2015?

Analizando la evolución de la economía nacional, Rego señaló que el crecimiento en términos interanuales de la actividad en el primer trimestre del año (2,4%) confirma que la economía habría ingresado en una fase de desaceleración. La comparación respecto al trimestre inmediato anterior respalda este diagnóstico, puesto que la estimación utilizada por cinve-CPA Ferrere (que depura los datos de factores estacionales, feriados especiales y eventos irregulares) sugiere que el Producto habría crecido 0,35% respecto al último cuarto de 2013. Cabe puntualizar que esta estimación difiere de la contracción de 0,4% señalada por el BCU en su Informe de Cuentas Nacionales, producto de diferencias metodológicas que podrían tener implicancias relevantes en los próximos meses. En efecto, de cumplirse las proyecciones de crecimiento de cinve-CPA Ferrere para el segundo trimestre del año (en torno a 0% interanual), posiblemente la estimación desestacionalizada del BCU arroje una nueva contracción trimestral de la actividad, lo que podría dejar a nuestra economía en zona de ?recesión técnica? (debido a la ocurrencia de dos trimestres consecutivos de caída). Sin embargo, la metodología utilizada por cinve-CPA Ferrere (que entre cosas corrige el ?efecto pascua?) arrojaría en el segundo trimestre un crecimiento positivo respecto al período enero-marzo, disipando de esta forma el diagnóstico de recesión técnica.

En lo que refiere a las perspectivas para 2014 y 2015, el economista Santiago Rego señaló que el Producto crecería 2,4% y 3,1% respectivamente, manteniendo la tendencia observada desde 2012 de crecimiento ?desacoplado? de la región. Esta trayectoria será impulsada por el consumo privado, en la medida en que el mercado laboral revierte las señales negativas exhibidas en los últimos dos años y los salarios reales evolucionan por encima de lo esperado, así como por los proyectos de inversión vigentes que también impulsan la demanda interna. Sin embargo, y considerando que en el corto plazo el escenario externo no será fuente de dinamismo, en ausencia de nuevos impulsos del lado de la inversión que permitan consolidar el desacople regional, el crecimiento podría volver a converger al de la región a partir de 2016.

Se confirma perforación del resultado fiscal. ¿Es necesario un ajuste fiscal?

Por otra parte, Alfonso Capurro sostuvo que el resultado del sector público se ha deteriorado sistemáticamente desde 2010, principalmente por la reducción en el resultado de las empresas públicas (que fueron utilizadas como ancla inflacionaria) y por un incremento del gasto primario corriente del agregado Gobierno Central-BPS, que creció por encima del Producto. En este contexto, en la Rendición de Cuentas del Ejercicio 2013 presentada este año, las autoridades reconocieron el deterioro fiscal y corrigieron sus proyecciones para 2014 y 2015. Según las estimaciones oficiales, el déficit global se ubicaría en 2015 en 3,2% del PIB, 2,5 puntos del PIB superior a lo programado en la Ley de Presupuesto de 2010 (en ese caso la proyección a 2015 era de 0,7% del PIB). Si bien el buen manejo de la deuda ha reducido considerablemente la vulnerabilidad de las cuentas públicas, el resultado primario actual (-0,5% del PIB) no sería sostenible, puesto que implicaría una trayectoria divergente de la Deuda Neta en términos del PIB. En este contexto, Uruguay necesita realizar una corrección de su equilibrio fiscal de una magnitud aproximada de 1% del PIB. Ello conllevaría una serie de restricciones fiscales para la próxima administración, que podría requerir de innovaciones tributarias para sustentar incrementos del gasto sin deterioros adicionales del balance fiscal.

Economía recuperó competitividad. ¿Hay espacio para nuevas correcciones de precios relativos?

Por su parte, analizando la competitividad de la economía uruguaya, el entorno internacional y sus perspectivas, Capurro señaló que la transición global hacia una fase de menor liquidez será moderada. En este contexto, y luego de la corrección abrupta de enero, los flujos de capitales han retornado a los países emergentes y las monedas de estos mercados se han fortalecido frente al dólar. En Uruguay, por su parte, el tipo de cambio a ?contrapelo? del resto del mundo permitió consolidar ganancias significativas de competitividad en el comienzo del año. Sin embargo, el desvío de precios respecto al promedio histórico se mantiene y los equilibrios externos continúan deteriorándose, fundamentalmente como consecuencia del desbalance en la cuenta de Servicios. En este marco, tanto el litigio argentino con los holdouts como un posible giro expansivo de la política económica en Brasil podrían añadir desafíos adicionales en términos de competitividad. En efecto, la persistencia inflacionaria en un contexto de deterioro fiscal reduce el margen de maniobra para impulsar una depreciación significativa de la moneda nacional. En un contexto de tarifas públicas reprimidas y deterioro fiscal que reduce la posibilidad de repetir políticas de control de precios como las implementadas en marzo de 2014, en las condiciones actuales de mercado el tipo de cambio tendría un ?techo? de $Uy 26 en 2015, insuficiente para acompañar una eventual depreciación como la practicada por Brasil en 2011-2012.

Finalmente, Oddone realizó una serie de consideraciones respecto a los desafíos con los que contará la próxima administración de Gobierno en el mediano plazo. En particular, el experto puntualizó que en ausencia de shocks de inversiones, el crecimiento de la economía convergería al de la región en 2016. Por este motivo, se requiere de una agenda coordinada para el crecimiento, que diseñe una secuencia de reformas para atacar los desafíos relativos a la educación, la inserción externa, los incentivos para la inversión e innovación, la gestión de las empresas públicas y el medio ambiente. Una adecuación del régimen macroeconómico y su coordinación eficaz con esta agenda de crecimiento requerirá de liderazgos sólidos, generación de consensos y capacidad de gestión.